jueves, 14 de enero de 2021

Cuando el cerebro envejece (André Aleman)

En la Feria del Libro de Bogotá de 2016 el país invitado fue Holanda. En esa feria compré dos libros interesantes sobre el cerebro y, en general, sobre el sistema nervioso y la salud mental. En la pasada navidad leí uno de ellos, sobre el cual quiero escribir un poco: Cuando el cerebro envejece del neurocientífico André Aleman.

Nacemos, crecemos,  envejecemos y morimos. Es el proceso natural de  la vida. Mucho se ha investigado, escrito y resuelto sobre el envejecimiento de nuestro cuerpo (el hardware), pero muy poco sobre el envejecimiento mental (el software). El autor se preocupa por este tema y en ocho (8) capítulos explica detalles relevantes en un lenguaje sencillo y claro.

Una de las justificaciones para estudiar este tema es la cantidad de personas que nacieron durante el baby boom o explosión de natalidad, justo después de la Segunda Guerra mundial. Estas personas ya alcanzaron o están alcanzando la edad para jubilarse (algunos sin los beneficios ni el apoyo económico por parte del gobierno). Puesto que la expectativa de vida ha aumentado, el planeta tiene una gran cantidad de personas mayores cuyo cerebro está envejeciendo (aunque a algunos se los ha llevado esta pandemia que nos atormenta).

Nuestra conducta es un reflejo de nuestra mente y esta es producto del cerebro y su interacción con el entorno, a través de los sentidos. El cerebro es un hardware complejo, conformado por neuronas que se comunican mediante impulsos eléctricos y químicos. Y esa actividad electroquímica depende mucho de nuestra genética, de lo que comemos, de nuestra actividad física y mental, del sueño (o buen dormir), del contexto social y de la edad.

Pero, el cerebro se degrada al envejecer, como cualquier otro órgano del cuerpo y esto afecta las funciones cerebrales, la mente, el comportamiento y se tienen muchas dificultades, como la pérdida de memoria y la lentitud. Aunque no todo es malo. Con el envejecimiento llega la sabiduría que dan los años. ¿Qué estamos haciendo por ellos, por los más sabios? Un primer comienzo es conocer y este libro nos ilustra y nos guía al respecto.

Capítulo 1: Todo va tan rápido: Cómo cambian nuestras capacidades mentales

Una simplificación de la mente nos lleva a dos niveles de capacidades mentales: el nivel inferior o básico, que corresponde a la memoria, la concentración (atención), la observación y el pensamiento, la capacidad de pensar, de razonar, incluyendo la velocidad con que lo hacemos. Un segundo nivel es llamado ejecutivo, consecuencia del primer nivel, que corresponde a la capacidad de planear, controlar, ejecutar, abstraer y pensar a más alto nivel, incluyendo el aprender.

Una de las principales pérdidas cuando envejecemos es la memoria. Aunque técnicamente nada se borra de nuestro disco duro, al envejecer se hace más difícil recuperar información. Por eso los olvidos son cada vez más comunes, a menos que ejercitemos la memoria.

Pero "la memoria es un término engañoso" dice el autor. Pues hay muchos tipos de memoria y no todos se pueden ejercitar y controlar y algunos se pierden irremediablemente al envejecer o cuando enfermamos mentalmente. La siguiente figura es un resumen que hice de los tipos de memoria que menciona el libro, complementado con otras lecturas:


Sin profundizar teóricamente ni entrar en detalles, en general se puede hablar de tres grandes clasificaciones de la memoria: (i) Al considerar la variable tiempo, por su duración, que tieme dos tipos claves de memoria, de corto y largo plazo, además de la memoria de trabajo y la memoria de los sentidos. (ii) Al considerar el estado de la conciencia se tienen dos tipos,  la explícita y la implícita. (iii) Al considerar lo que se memoriza se puede hablar de verbal, visual, auditiva, emocional, etc.

A su vez, la memoria de largo plazo puede ser declarativa o procedimental, que yo las  relaciono con las ideas de conocimiento explicito y tácito. Y la memoria declarativa puede ser semántica (conceptos, lo abstracto) o episódica (hechos, lo concreto), lo que incluye la memoria autobiográfica. Aquellos que recordamos muchos detalles de nuestra vida, incluso de la infancia, tenemos una gran memoria episódica y autobiográfica, que mezclada con la memoria semántica nos hace muy parecidos a Funes el memorioso...

Los investigadores en neurociencia, psicología, psiquiaría y otras áreas han desarrollado muchas técnicas y mecanismos para medir la memoria, la concentración, la velocidad mental y todas las funciones mentales. La memoria es la más estudiada, precísamente por su complejidad, además de su relación con el aprendizaje. Y los estudios indican que la memoria se afecta con el tiempo, empieza a reducirse o a envejecer lentamente desde los veinte (20) años. Entonces no es en vano el gusto por el bambuco Yo también tuve veinte años del colombiano José Alejandro Morales.

A continuación comparto tres (3) gráficas interesantes del libro sobre el desempeño de la memoria, la velocidad mental y el vocabulario.


Según estas gráficas, el popular refŕan de "loro viejo no aprende a hablar" es equivocado para el cerebro humano, pues la curva del vocabulario aumenta con los años y no decrece mucho al final. Pero al envejecer si es cierto que olvidamos y nos hacemos lentos. Como en la canción de Piero "ahora ya caminas lento"... [y piensa lento] "como perdonando el viento" [y como perdonando el tiempo]... 

Otra habilidad que se pierde es la flexibilidad mental. Esta habilidad nos permite cambiar rápidamente de contexto en nuestra mente. Por ejemplo,  pasar de letras a números y de allí a colores, formas, texturas, etc. La flexibilidad se relaciona mucho con la memoria y la velocidad mental y se puede ejercitar desarrollando pasatiempos mentales en conjunto con actividades físicas y relaciones sociales.

En general, al envejecer nuestro cerebro se degrada y se reducen o perdemos lentamente nuestras funciones mentales básicas, como la memoria, la concentración, la observación (con todos los sentidos), la velocidad, el pensamiento y, en consecuencia, se reduce y perdemos nuestro yo (el mito del yo de Llinás), nuestra mente... Debemos asumir una actitud positiva (complicado en estos tiempos de pandemia y enfermedades mentales) y procurar hábitos físicos, mentales y sociales que nos permitan cultivar nuestra mente y enfrentar mejor la inevitable vejez. En general, debemos comer bien, dormir bien, ejercitarnos mucho, mantenernos ocupados y, ojalá, estar acompañados...

Capítulo 2: Un ánimo tranquilo: Por qué las personas mayores son emocionalmente más estables

Mientras el primer capítulo estaba centrado en las funciones cerebrales y el intelecto, este segundo capítulo trata sobre la personalidad, las emociones, la felicidad y el sentir que al envejecer se logró un balance en la vida. Hay una cita de Donald Sturrock sobre su percepción de la vejez:

"Una especie de serenidad desciende sobre mi como una cálida niebla. Se ha acabado la lucha. Cada movimiento se vuelve lento. Tengo todo el tiempo del mundo. No hay prisas. La lucha interminable por lograr algo excepcional ha acabado"

Existe el estereotipo equivocado de que al envejecer nos volvemos malhumorados, gruñones y nos quejamos por todo. Pero es todo lo contrario. Al envejecer nos volvemos más optimistas y positivos y más felices y sabios. En especial si durante nuestra vida hemos logrado un balance entre nuestros propósitos y nuestros logros reales.

Una condición común de la personalidad en el mundo moderno es el neurocitismo, una especie de estado emocional desordenado, desesperación, inconformidad, depresión, ansiedad, estrés, etc. Y no es una condición de la vejez, todo lo contrario, con la vejez nos hacemos emocionalmente más estables, más serenos y buscamos más la felicidad.

Las emociones tienen una relación íntima con el cerebro y el contexto social en que vivimos. Hay que sentirlas, expresarlas, hablar sobre nuestras emociones, pues pueden afectar nuestra mente y todo nuestro organismo. El autor plantea que las personas mayores logran enfocar la atención de su cerebro en los aspectos positivos. Además, yo agregaría que las personas mayores vivieron una época muy diferente a la nuestra. Hoy en día la salud mental es uno de las principales preocupaciones de la sociedad, mucho más en estos tiempos de pandemia.

Las personas mayores, por su amplia experiencia durante muchos años, tienen mayor capacidad para comprender y decidir sobre situaciones complejas. Posiblemente a futuro sea apropiado emplear a los ancianos, para que sean mentores, guías, asesores, acompañantes, escuchas, concejeros...

Capítulo 3: Las células grises: La anatomía del cerebro que envejece

El tercer capítulo regresa a los detalles científicos del cerebro. Es el órgano más complejo, incluso más que el corazón, los pulmones o los riñones. Además, está ligado al sistema nervioso que es el sistema más importante pues controla completamente nuestro ser. El cerebro es una masa gris y blanca. La masa gris corresponde al cuerpo de las neuronas y la masa blanca a la zona de comunicación electroquímica, los neurotransmisores, donde tiene lugar la sinapsis.

Al envejecer el volumen del cerebro se reduce un 10% y su peso se reduce entre un 5% y un 10%. Además,  al tomar imágenes del cerebro, el tono del gris y blanco cambia a negro, en la medida que desaparecen neuronas y actividad neuronal. Pero también hay neurogénesis o creación de nuevas neuronas, contrario a lo que la mayoría cree. Además, hay una hipótesis de "reserva cognitiva", según la cual podemos mantener nuestra mente joven y seguir aprendiendo siempre, con una capacidad casi infinita de nuestro cerebro.

Algo interesante del libro es lo referente a los estudios longitudinales y su importancia en la ciencia del cerebro. Estos estudios han permitido identificar cómo cambia el cerebro a través del tiempo, desde jóvenes hasta viejos y cómo se opera nuestro cerebro al envejecer. Algo cuiroso que se ha identificado es el patrón PASA (Posterior-Anterior Shift in Aging), el cual consiste en que el cerebro invierte algunas funciones al envejecer, como si una parte del cerebro apoyara a la otra. De manera similar a la separación de hemisferios izquierdo y derecho, al envejecer se activa más la parte anterior que la posterior, lo cual es invertido en los jóvenes.

Los estudios indican que si mantenemos buenos hábitos es posible vivir más años sin que nuestra mente envejezca. Todo depende de los hábitos alimenticios y de sueño, de la actividad física y mental, del contexto social y, en ocasiones, de la ayuda de medicamentos especiales. Conviene ejercitar el cerebro durante toda la vida, con lo cual nuestra vejez será mucho mejor en materia de salud mental.  En general, como dice la popular canción del Chavo del 8:

"si tu eres joven aún, joven aún, joven aún

mañana viejo serás, viejo serás, viejo serás

a  menos que con afán, que con afán conserves

tus inquietudes y así nunca enjevecerás..."

Y dentro de las inquietudes que debemos conservar y ejercitar están la memoria, la concentración y el pensamiento, para lo cual ayuda mucho leer y escribir a diario...

Capítulo 4: ¿Olvidos o demencia? ¿Dónde está la frontera entre ambos y qué se puede hacer al respecto?

Después de conocer los detalles sobre nuestro maravilloso cerebro, el capítulo cuatro pasa a tratar las enfermedades, algo que es inevitable con el tiempo y que puede presentarse a cualquier edad. Las enfermedades del cerebro y de la mente pueden obedecer a muchos factores, tanto biológicos como psicológicos.

Son síntomas de enfermedad los transtornos del sueño, las dificultades de lenguaje y aprendizaje, olvidos y fallas de memoria, depresión, miedo, ansiedad, agresividad, alucinaciones y delirios, entre otros. Conviene buscar ayuda médica si este tipo de situaciones se hacen frecuentes, permanentes y críticas, pues se puede relacionar con el Deterioro Cognitivo Leve (en inglés Mild cognitive impairment - MCI).

También se encuentran el Alzheimer, el Parkinson y las lesiones y problemas propiamente cerebrales, producto de factores genéticos, golpes y otras enfermedades que afectan el cerebro. En cualquiera de estos casos se pueden generar problemas de memoria y demencia, siendo la demencia el caso más grave y que requiere tratamiento especializado.

En materia de enfermedades del cerebro y mentales, la recomendación es siempre el diagnóstico especializado, para lo cual debe recurrirse al médico cuando se tengan síntomas. Además, el top 5 de buenas prácticas siempre será: alimentación, sueño, ejercicio físico, ejercicio mental y ejercicio psicosocial.

Capítulo 5: Cuerpo y mente: La influencia de las hormonas

Este quinto capítulo relaciona todo lo estudiado previamente sobre el cerebro con la alimentación y las hormonas. En materia de cerebro y mente la palabra clave es neurotransmisores, que son el combustible de la actividad neuronal. Los neurotransmisores dependen de nuestras hormonas y estas dependen mucho de nuestra alimentación y del resto del cuerpo.

Es por eso que al crecer, durante la niñez y la adolescencia y al envejecer se pueden generar cambios emocionales, de humor, de estrés y de muchos otros aspectos que se reflejan en nuestra personalidad. Con la adolescencia y el envejecimiento hay cambios hormonales y esto afecta los neurotransmisores. Algo similar sucede cuando hay algún tipo de enfermedad que modifica la producción de hormonas en nuestro cuerpo.

Y sin entrar en el debate de identidad de género, la biología del hombre y la mujer es  diferente y por lo tanto son diferentes los cambios hormonales y sus efectos en los neurotransmisores, el cerebro y la mente.

En cualquier caso, la alimentación y el sueño son dos aspectos fundamentales para evitar y manejar este tipo de situaciones.

Capítulo 6: Remedios y entrenamientos: Lo que funciona y lo que no

En términos médicos lo que importa es sanar la enfermedad u ofrecer una vida digna, tranquila y feliz al enfermo. Los medicamentos siempre existirán y son el mejor aliado, siempre que sean producto de investigaciones rigurosas, de trabajos científicos de calidad. En la actualidad abundan las propuestas de medicina y medicamentos alternativos, pero algunos de ellos son un fraude. En este sexto capítulo se trata este tema, ¿qué sirve y qué no sirve? en materia de cerebro y mente.

Lo primero que sirve es ejercitar el cerebro, mantener la mente activa. Hay una cita de Marco Tulio Cicerón: "la memoria disminuye si no se ejercita". Esta recomendación funciona mejor que cualquier pastillita prodigiosa que prometa elevar nuestro cerebro a su máxima capacidad, como en las películas Sin Límites (con Bradley Cooper y Robert De Niro)  y Lucy (con Scarlett Johansson y Morgan Freeman).

Si se trata de consumir medicamentos (naturales o artificiales), está probada la importancia de una alimentación balanceada y el consumo de suplementos vitamínicos, en especial la vitamina B12 y el ácido fólico. El libro menciona el Ginkgo Biloba pero deja claro que,  aunque tiene algunos efectos benéficos, no hay una prueba científica de su total efectividad. En general, el mercado ofrece muchas panaceas para el cerebro y la mente, pero suelen depender de otros factores, incluyendo el efecto placebo, que no es otra cosa que la fe y el resultado mágico.

De nuevo, en materia de cerebro y mente y de cara al envejecimiento, la clave es el top 5 de buenas prácticas: alimentación, sueño, ejercicio físico, ejercicio mental y ejercicio psicosocial.

Capítulo 7: La sabiduría que llega con los años: ¿Por qué son más sabios los ancianos?

Al margen del hardware (el cerebro) y del software (la mente, que para los monistas no existe y es simplemente el producto del cerebro) los seres humanos nos diferenciamos de los animales y de las máquinas porque tenemos espíritu, alma o simplemente conciencia (el problema de la conciencia, de las quálias, la pregunta difícil), el factor religioso. Posiblemente allí es donde reside la sabiduría, que corresponde a este séptimo capítulo. La sabiduría es como el máximo nivel de la mente humana.

Lo primero que el libro intenta es definir formalmente la sabiduría, a la luz de las ciencias involucradas. La definición que plantea el autor es adoptada de Caroline Bassett:

"la sabiduría es la capacidad de comprender situaciones complejas, fomentando los comportamientos óptimos a fin de que el resultado satisfaga a la mayor cantidad de implicados y tenga en cuenta el bienestar de todos"

También se cita la biblia (Job 12:12) para relacionar la sabiduría con la vejez:

"la sabiduría llega con la edad y el entendimiento con la larga vida"
El autor propone que la lentitud mental, que se origina por envejecer, nos hace más sensatos. Nos lleva a pensar con más tranquilidad y a decidir con conocimiento de causa. A considerar todas las alternativas y posibilidades. A ser menos impulsivos y precipitados (algo propio de la juventud). A recurrir al pasado, según la experiencia y a mirar hacia el futuro, evaluar las consecuencias y riesgos. Por eso nos hacemos más sabios, porque abordamos situaciones muy complejas y logramos resolverlas de la mejor manera posible.

Básicamente, perdemos algo de memoria, de velocidad y de capacidades mentales para cierto tipo de actividades, pero ganamos en sabiduría, en control, en resolución de situaciones complejas que involucran a personas, a seres humanos.

La sabiduría de las personas mayores es muy importante y necesaria en estos tiempos. Desafortunádamente la sabiduría se está muriendo producto de la pandemia.

Capítulo 8: Un cerebro óptimo: Consejos científicamente probados

Este último capítulo inicia contando la anédota de Robert Marchand, quien ha roto marcas de ciclismo desde que cumplió cien (100) años y a la fecha sigue vivo con ciento nueve (109) años. Es un caso ejemplar que sirve como prueba científica de cuáles son los mandamientos, buenas prácticas, recetas, secretos o consejos para envejecer sanos y fuertes, la medida de las posibilidades de nuestra especie.

El libro cuenta además el caso de Okinawa, las isla de Japón donde vive las personas de mayor edad en el mundo, algo que se explica por su alimentación y sus hábitos de ejercicio físico y la importancia de la espiritualidad.

Además se enfatiza en la complejidad de lo genético y su influencia en muchas enfermedades que nos afectan. Al respecto menciona "elija a sus padres con cuidado" citando a René Kahn y sus diez mandamientos para el cerebro.

También se repite la importancia del amor, del afecto, de estar rodeados de personas, familiares, amigos quienes nos fortalecen y equlibran las pérdidas del envejecimiento. Además, los grupos de personas nutren la espiritualidad, que nos ayuda a lidiar con las ideas de la enfermedad y la muerte.

De manera general se pueden resumir estos diez (10) consejos científicamente probados, de acuerdo a la lectura del libro:

  1. Alimentación:  incluyendo el uso de suplementos vitamínicos, pero en lo posible alimentación natural.
  2. Ejercicio físico: según el adagio "mente sana en cuerpo sano".
  3. Ejercicio mental: leer, escribir, oir música, resolver problemas que desafíen la mente, aprender, mantenerse activo mentalmente.
  4. Ejercicio espiritual: que es independiente del tipo de religión y ritos pero que implica un nivel de abstracción mental más allá de lo meramente intelectual.
  5. Ejercicio psicosocial: mantenerse rodeado de personas, familiares, amigos, vecinos, compañeros de actividades diarias, con quienes se hable y comparta. Es fundamental el amor, el afecto, el cariño, el sentirse parte importante de un grupo de personas.
  6. Sueño: dormir bien es muy importante para la salud mental. Cuando no se duerme bien hay un síntoma que refuerza la enfermedad y debe tratarse a tiempo y de la mejor forma posible.
  7. Equilibrio entre la rutina y la innovación: la novedad refresca el cerebro en todos los aspectos. Cambiar de rutina al caminar. Ir por calles diferentes a diario, domir en diferentes posiciones y procurar buscar nuevas experiencias. Ponerse retos y hacer planes a mediano y largo plazo.
  8. Un entorno, ecosistema apropiado: tanto para vivir como para trabajar y para todas las actividades de la vida. Entorno o ecosistema desde una perspectiva holística.
  9. Control médico periódico: es una de las grandes deudas de la política pública y de las prácticas que deberían promoverse. Ir al médido a chequeo general, con exámenes completos, a fin de prevenir realmente las enfermedades y atenderlas a tiempo.
  10. Aceptar los tratamientos médicos: algo común es que no aceptamos los tratamientos, los cuales son necesarios cuando hay diagnóstico de enfermedad. Ayúdate que yo te ayudaré rezan el Evangelio.

Para cerrar, dos ideas adicionales:

  • El libro pone en sus conclusiones que "no solo somos nuestro cerebro" lo cual me lleva al segundo libro que tengo pendiente por leer, titulado "Somos nuestro cerebro" del profesor Dick Swaab y que espero "roer" este año.
  • Hay una película que repiten por televisión cada semana, traducida como "In-Mortal" cuyo nombre original es Self/less. La he visto varias veces y tiene una frase que no logro memorizar pero su idea es "el discernimiento que llega con los años", muy similar al título del séptimo (7) capítulo. Esta película vende la idea de que la mente y el cerebro son diferentes y que la mente sana se puede transferir de un cerebro a otro. La película aborda el dilema ético y permite reflexionar mucho sobre la vejez, la muerte, el alma y todos estos interesantes temas del cerebro y la mente.


martes, 5 de enero de 2021

La pregunta difícil - Rodolfo Llinás - Pablo Correa

El periodista Pablo Correa escribió una especie de entrevista-biografía sobre el científico especializado en el cerebro Rodolfo Llinás. Bajo el título "La pregunta difícil", expone en dieciocho (18) capítulos la vida, obra e ideas de Llinás acerca del cerebro.


Lo leí hace mucho tiempo y tenía pendiente escribir algunas de las cosas que me cautivaron, sin entrar en muchos detalles, solo para recordar a futuro y releer...

Los primeros años de Rodolfo Llinás, su abuelo, su familia, los colegios por donde pasó, la Universidad, la Bogotá antigua y todas sus anécdotas fueron determinantes en la vida de este científico. ¡Hacer preguntas! es una de las claves y, lógicamente, buscar incansablemente respuestas. Se necesita de un ecosistema, de un contexto para que no se marchite el cerebro creativo y curioso con el que nacemos. A veces nos toca crear ese ecosistema o buscarlo o imaginarlo.

De los agradecimientos se puede intuir que Patricia Llinás, su hermana, tuvo mucha influencia en el libro. Al finalizar el tercer capítulo hay una cita de Patricia Llinás que no olvidaré:

"La vida es lo que uno hace para matar el tiempo".

La anécdota de los gatos es bastante curiosa y sorprendente. Llinás lo pasaba matando gatos para estudiarlos. Y cuando acabó con todos los gatos del barrio siguió con el gato de su hermana. Cuando esta le preguntó ¿dónde está mi  gato? la respuesta de Llinás fue "su cerebro está en ese frasquito".

Dos enfermedades extrañas pero muy interesantes, dos palabras nuevas: los hemineglécticos y los prosopagnósicos. Los primeros solo reconocen la mitad de lo que ven, como el caso de Federico Fellini. Los segundos reconocen pedazos de rostros pero jamás logran reconocer un rostro completo.

La relación entre el cerebro y la gravedad y la hipótesis de Llinás de que el humano depende del planeta Tierra pues su genética obliga a que las neuronas trabajen en sincronia con las ondas electromagnéticas. Aquí se explica por qué algunos enfermos mentales (y también algunos sanos) cambian su comportamiento con las estaciones lunares. Además, Llinás plantea que la conciencia no es algo exclusivo de los humanos, sino de todo aquello donde se puedan rastrear frecuencias de 40 hertz...

Llinás afirma que somos nuestro cerebro y que nuestra especie ha evolucionado durante muchos años, creando un mundo virtual de lo que captan los sentidos:

"Si aceptamos que se trata de un sistema cerrado y único, ello implica que es una forma diferente de expresar todo. En otras palabras, la actividad cerebral es una metáfora para todo lo demás. Tranquilizante o no, el hecho es que somos básicamente máquinas de soñar que construyen modelos virtuales del mundo real".

El primer encuentro y posterior relación de Llinas con el Premio Nobel John Eccles. Ambos de escuelas de pensamiento diferentes. Llinás es monista y Eccles fue siempre dualista. Los segundos son más afines a lo religioso y espiritual, pues creen en la separación del cerebro y la mente. Los primeros, en cambio, consideran que la mente no es una entidad independiente sino solo la actividad cerebral, el producto del cerebro. Llinás dejó por escrito su contradicción con el premio Nobel en el libro "El Cerebro y el Mito del Yo"... Pienso que para ser gran científico se requiere estar al lado de verdaderos grandes científicos, para contradecirse y trabajar juntos...

La relación de Llinás con el artista Carlos Jacanamijoy, de quien tiene una pintura en la entrada de su casa. Y la relación con Gabriel Gracía Márquez y su pregunta sobre en qué lugar del cerebro está el amor y la respuesta de Llinás, de que todo es el cerebro y que la conciencia es mera actividad eléctrica y química.. Pienso que arte y ciencia son un dualismo importantísimo y que en todo artista hay un científico y viceversa...

Son muchas ideas interesantes y muchas las preguntas, lo cual es importantísimo, preguntas. Con todo lo que se sabe hoy sobre el cerebro, sobre nuestra genética, sobre las enfermedades mentales, sobre el envejecimiento del cerebro y con el problema actual de la pandemia por COVID19 y el virus SARS-CoV-2 (y lo poco que se sabe sobre esto), surge el debate ético sobre qué estamos haciendo como humanos por los humanos enfermos. Al final de cuentas, parece que estamos en una coyuntura crítica evolutiva y en la evolución siempre hay perdedores. ¿Qué estamos haciendo por ellos?


lunes, 28 de septiembre de 2020

El que sabe hacer, hace, el que no, enseña...

Hace algunas semanas una amiga me compartió un artículo que atribuía a Johann Wolfgang von Goethe la siguiente expresión con una crítica a los profesores:

"El que sabe hacer, hace. El que no sabe hacer, enseña y ... el que no sabe enseñar, escribe manuales de pedagogía"

Yo había escuchado sobre la primera parte de la frase hace unos diez (10) años, por un profesor que estudiaba Doctorado mientras yo estudiaba Maestría y con quien compartí un curso de Sistemas de Información, en la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad Nacional de Colombia. Curiosamente, en aquella época yo leía mucho y comentaba sobre el debate de Rigor y Relevancia, la aparente brecha que existe entre el contexto de la Universidad y el "mundo" profesional. Aún sigo leyendo, escribiendo, hablando y pensando sobre eso...

Volviendo a la expresión, en realidad el artículo cita con asombro a Francis George Steiner, pues es éste quien atribuye la autoría de la crítica a Goethe. La citación conduce al libro Elogio de la transmisión: Maestro y alumno, una entrevista de Cécile Ladjali. Así que busqué la referencia y verifiqué el texto en español, pero no pude encontrar en línea la versión original en francés...

El artículo me había sembrado la duda, pues el autor se sorprendía de que Steiner y Goethe hicieran mención a éste tipo de críticas tan fuertes a los profesores. Además, si uno busca la frase sin mencionar a Steiner o a Goethe, quien aparece más veces como autor es George Bernard Shaw. Entonces seguí buscando y encontré un segundo libro de Steiner con un texto similar. El libro se titula Lecciones de los Maestros y pude encontrar la evidencia en español e inglés.





Es indudable que para Steiner el autor es Goethe, pues hay dos publicaciones que así lo corroboraban. Uno podría quedarse con esta verdad, sobre todo si se revisa la biografía de Steiner: su origen es francés, migró a Estados Unidos por el Nazismo, fue un gran políglota que conocía el alemán, el griego y el latín, además de sus dos lenguas madre. Y, sobre todo, su profesión era traducir y su especialidad era la literatura comparada.

Sin embargo yo tenía la sospecha y seguí buscando. Quería encontrar un texto propio de Goethe donde apareciera dicha crítica o algo parecido. Leyendo el segundo libro (el de Lecciones de los Maestros) la referencia tácita nos guía hacia Fausto, un poema trágico de Goethe, bastante complejo de leer, pero muy interesante. Encontré una traducción al español de José María Valverde y otra de Manuel Antonio Matta, ambas bastante diferentes. Y, además, encontré un sitio web que tiene traducción simultanea de Fausto en varios idiomas (ruso, alemán, inglés, italiano y español). Hay algunos fragmentos en estas versiones traducidas de Fausto que podrían considerarse levemente relacionadas a la crítica en cuestión, pero la relación no es explícita, no es literal.

Después de mucho buscar y leer sobre Fausto, Goethe y la famosa crítica a los profesores, no logré encontrar suficiente evidencia y, desafortunádamente, Steiner murió a inicios de este año, de modo que no hay a quién preguntarle. Y si se considera que Goethe era alemán, la búsqueda se complica mucho...

Pero no me rendí. Seguí buscando y encontré un segundo artículo que pone como nota de pie de página la expresión en alemán y la atribuye a Goethe: 

"Wer es kann, der tut es, wer nicht kann, der lehrt"

Y si se busca esta oración en alemán se encuentran dos sitios web de citas con una expresión muy similar:

El segundo sitio atribuye la frase a Bernard Shaw. Por lo cual abandoné a Goethe y seguí la búsqueda por ese camino.
 
Encontré dos artículos que mencionan a Shaw: Uno en el contexto de la medicina, el cual contradice la crítica a los profesores y plantea que la fortaleza del profesor es ser siempre un estudiante, algo con lo cual estoy muy de acuerdo, aunque no todos los profesores lo hacen. El otro artículo cita un libro de Shaw titulado Hombre y Super Hombre, aunque comienza mencionando una expresión similar de Woody Allen:
Who can't do, teach. And those who can't teach, teach gym
Ésta expresión de Woody Allen aparece en varios videos de Youtube, de los cuales cito estos dos:



https://www.youtube.com/watch?v=0VYhffhsfY8


https://www.youtube.com/watch?v=VB4-NigiTkI


Siguiendo con Shaw, su libro Hombre y Superhombre se encuentra disponible en español e inglés (gracias al Acceso Abierto, en especial los proyectos Gutenberg e Internet Archive). Y allí está la evidencia de la primera parte de esa popular expresión crítica sobre los profesores. Aunque muchos la usan citando a Steiner y Goethe, la evidencia indica que es de Shaw.



Si uno analiza las biografías de los dos posibles autores: Goethe (nacido en 1749 y fallecido en 1832) es más antiguo que Shaw (nacido en 1856 y fallecido en 1950), con lo cual el segundo pudo leer al primero y omitir la citación. Pero esto es mera especulación, no quiero comparar a Shaw con los grandes expertos en plagio de nuestra época. Sólo el difunto Steiner sabe porqué mencionó en dos libros a Goethe y no a Shaw. De manera que si alguien desea usar esta expresión, bien sea en defensa o ataque a los profesores o para cualquier otro fin, debería aclarar que hay evidencia de que el autor es Shaw y evidencia de que Steiner considera como autor a Goethe, pero no hay evidencia de que el autor sea Goethe. Todo un rompecabezas que resumo en la siguiente imagen,  donde incluyo unos pasajes de Fausto que podrían relacionarse y sobre lo cual seguiré buscando y leyendo...



Hay un amigo a quien le pregunté pero aún no me responde, ojalá él tenga algo que pueda ayudarme a salir de la duda...

Por último, la crítica de esa expresión tiene mucho de largo, de ancho, de alto, de antiguo y de todas las demás dimensiones que se quieran considerar. Y, como todas las críticas, conviene estudiarlas en detalle, asimilarlas y seguir sembrando synergya y entropya...

PD.
Después de haber publicado recordé que hay varios libros dedicados a este menester de verificar las citas. Uno de ellos se puede consultar en Google Books y dice que la cita es de Shaw, su título es "The Quote Verifier: Who Said What, Where, and When" y el autor es Ralph Keyes. El otro está en Amazon pero no se encuentra en línea y se titula "The Book of Who Said That?: Fascinating Stories Behind Famous Quotes"...

sábado, 16 de mayo de 2020

Poesía y Educación

Encontré un artículo titulado Rabindranath Tagore y sus ideales sobre la educación, en el que citan dos ensayos suyos titulados La Escuela del Poeta y El Maestro Ideal. Quiero dejar aquí guardados dos fragmentos que cita ese artículo y que hacen parte del pensamiento de Tagore:

"Children run out of the Temple and play in the dust. God watches their games and forget the priest (Los niños abandonan corriendo el templo y juegan en el polvo. Dios contempla sus juegos y olvida al sacerdote)" (La Escuela del Poeta).


"...Un maestro nunca puede enseñar verdaderamente a menos  que  él  esté  todavía  aprendiendo...  La  verdad  no  solo  debe  informar  sino que también debe inspirar. Si la inspiración muere y la información se acumula, entonces la verdad pierde su infinitud..." (El maestro ideal).

Hay también un poema que me gusta mucho, del poeta colombiano Samuel Vásquez y que también quiero dejar aquí:

Cuestión

Preguntar demanda fuerza y suavidad
porque es una exigencia y un ruego
Preguntar es tocar: la voz
una mano ciega que tañe el universo
La pregunta, inquisición de seda,
nos hace amos y siervos a la vez
El poema es la respuesta que pregunta
Miramos a un hombre y vemos a una pregunta
El hombre es arcilla repleta de preguntas
y con cada pregunta desafía al silencio
La pregunta, confesión y deseo,
no descansa ni en el diván de la respuesta
La respuesta tiene complejo de superioridad.

Siempre que escucho hablar de educación y siempre que asisto a reuniones y encuentros sobre educación y siempre que estoy en el salón de clase con mis estudiantes (ahora en el salón virtual) recuerdo, entre muchos otros, estas tres ideas...

viernes, 15 de mayo de 2020

Mis profesores

Julián de Zubiria promovió este año en redes sociales el hashtag #GraciasMaestros y lideró una Twitteraton por los maestros colombianos. Yo suelo usar más Facebook que Twitter, pero procuré publicar en ambas redes sociales. Transcribo aquí el ejercicio de memoria que realicé el quince (15) de Mayo de este año de Pandemia. En el Dia del Maestro intenté recordar a todos mis profesores. Aunque olvidé algunos, el porcentaje de memoria fue alto.


Este es el primer poema que memoricé, después de las coplas de mi papá, que me las enseñaba mi mamá Margarita Contreras Rico, que fue mi primera profesora... no recuerdo el autor pero si la profesora: Clara Villamizar (Chinácota, primero primaria). En segundo primaria la profesora fue Sonia Gil y en tercero primaria y 2 meses de cuarto primaria la profe fue Zulay Villamizar, ambas también en Chinácota. Y la profe de religión era Hermelina Buitrago, quien nos contaba la historia de que el niño Dios había convertido el aserrín y los churcos de la madera en sancocho 😊. El rector de la escuela era el profesor Obdulio Rozo. Aún recuerdo la formación, rezar el Rosario y cantar el Himno Nacional. Cada semana se memorizaba una estrofa 🤦‍♂️
Luego migramos del pueblo. En cuarto y quinto primaria la profe fue Esperanza Gil... luego sigo con los profes de bachillerato...

Gratitud

Mi gran profesora
noble de verdad
me enseña a ser bueno,
me enseña a rezar.
En todo momento
me da una lección
para que en la vida
me vaya mejor.
Con letras y números
me empieza a equipar
para mi conquista
de ciencia y verdad.
Y ya que por ella
recibo gran luz
prometo guardarle
siempre gratitud.

En el colegio uno tenía un profesor titular del curso y un profesor por materia. Voy a tratar de nombrarlos en orden cronológico, aunque no es sencillo:

Paulo Carrillo, titular en 6° y profesor de español. Hacíamos centro literario todas las semanas. Ya murió el profe...

Luz Stella Polanía, profesora de inglés y francés en casi todos los años.

Dinael Parada y Carlos Rojas, de matemáticas en 6° y 7°.

Maria Dela Rojas (nunca supe cómo escribir el nombre, así que tomo el de mis registros de notas). Titular en 7° y profesora de biología y salud.

Marlene Palacios, titular en 8°, también profesora de biología y salud.

Maria Eugenia Peñaloza, titular en 9° y profesora de ciencias sociales (historia y geografía) y de filosofía en 10°.

Elsa Mendoza, profesora de taquigrafía, mecanografía y comerciales.

Victor Hugo Mogollón, profesor de español, inglés y francés de 9°, 10° y 11°.

Gabriel Olaza Gelvez, titular en 10° y 11° y profesor de Matemáticas desde 8°en varios cursos.

Profesor Francisco "pacho" Duarte, de biología en 9° y química en 10°.

Daniel Nuñez, Reinel Romero y Elsa Zapata, de educación física.

Profesor Jairo Camacho, de matemáticas y física desde 8° en varios cursos.

Profesora Doris(no recuerdo el apellido y perdí esos registros), profesora de Química en 11°.

El sacerdote Vicente Rojas, profesor de religión en todos los grados y de filosofía en grado 11°.

Profesora Rosa Edilma Castellanos, pisocorientadora

Hay muchos otros...

En 10° y 11° uno estudiaba en el CASD, de allí recuerdo principalmente al profesor Ciro Quiñonez.


Y llegó la Universidad... Tengo en mi agenda la lista de todos los profesores... Aquí voy por cada semestre...


Semestre 1

Fabio Augusto Corzo Salamanca, Intro. a Ing. de Sistemas
Juan Fernando Ortega, Cálculo I
Hector Miguel Parra López, Programación I
Eduardo Zárate Caballero, Dibujo Técnico
Enrique Lindarte, Inglés I
Isabel Salas, Técnicas de Estudio y Metodología de  Investigación...


Semestre 2

Alvaro Mejía, Programación II
Carlos Casadiegos, Cálculo II
Juan Fernando Ortega, Algebra Lineal
Aura Nelly Vera, Ofimática
Gabriel Peña, Física I
Rubby (no recuerdo apellido), Inglés II

Semestre 3

Jairo Cely Niño, Cálculo III
Jorge Enrique Salazar, Algebra Moderna
Gustavo Tinjacá, Programación III (Cobol)
Martha Blanco, Constitución Política
Emma Gamboa, Principios de Administración
William Espinel, Física II
Victor Useche, Laboratorio Física I

Semestre 4

Jairo Cely Niño, Cálculo IV
Nestor Rojas, Métodos Numéricos
Luis Alberto Suarez, Estructuras de Datos
Carmen Rosa Vera, Sistemas Administrativos
Adolfo Bolívar Grimaldos, Física III
Victor Useche, Laboratorio Física II
Jorge Reyes, Ajedrez I (le decía Chaturanga)

Semestre 5

Juan Simón Jaimes Boada, Cálculo V
José Martín Calixto Cely, Teoría de Grafos
Oscar Moros, Estadística y Probabilidad
Janeth Parada, Teoría de Sistemas
Jose Ricardo Castillo, SocioAntropología
Javier Barros, Circuitos Eléctricos
José Antonio Alvarez Trillos, Sistemas Contables

Semestre 6

Saury Tomas, Investigación de Operaciones
Psicología, Adriana Castellanos
John Jairo Ramirez, Electrónica
Humberto Barajas, Análisis y Diseño de Sistemas
Frank Saenz, Ensamblador
Patrocinio Ararat, Sistemas Financieros


Semestre 7

Cesar Alberto Niño, Modelos
Mery Janeth Sarmiento, Compiladores
Pilar Rodriguez, Ing de Software
Jose Ricardo Castillo, Relaciones Humanas
Jorge Enrique Salazar, Circuitor Lógicos
Oscar Pérez, Htas de programación
Janeth Parada, Informática Educativa


Semestre 8

Oscar Gallardo, Sistemas Operativos
Juan Carlos Martinez, Psicología Industrial
Jorge Enrique Salazar, Simulación Analógica
Alfonso Jimenez, Ingeniería Legal
Boris Morales, Computación Gráfica
Janeth Parada, Bases de Datos


Semestre 9

Luis Alberto Suarez, Teleprocesos
Ema Gamboa, Administración de Centros de Cómputo
Humberto Barajas, Auditoría I
Simeón Sepúlveda, Ética
Hugo Portilla, Simulación Digital

Semestre X

Carlos Eduardo Pardo, Redes
Blamir Palacios, Evaluación de Proyectos
Ema Gamboa, Auditoría II
Rafael Ocampo, Sistemas Operativos II
Jefrey Ardila, Inteligencia Artificial

Y ahora siguen los profesores de Maestría...


Empecé una Maestría en la Universidad de los Andes de Mérida, Venezuela, la ULA, allí aprendí mucho pero no terminé, aquí la lista de esos profesores:

Leandro Rabindranat Gómez León, Análisis y Diseño de Algoritmos
Jacinto Dávila, Lógica y Matemáticas para Computación
Alexander Parra Uzcátegui, Sistemas de Información Geográfica
Domingo Hernández, Ingeniería de Datos
Wladimir Rodríguez, Desarrollo de Aplicaciones Empresariales y seminarios
Reinaldo Mayol, Seminario de Criptografía
Gerard Páez Monzón, Seminario de Arquitectura de Computadores
Flor Narciso, Lenguajes de programación, compiladores y teoría de computación

Y de la Universidad Nacional de Colombia:

Elizabeth León Guzmán, Seminario
Beatriz Helena Díaz Pinzón, Sistemas de Información
Jean Pierre Charalambos Hernández, Seminario
Jonatan Gómez Perdomo, Seminario
Jose Ismael Peña Reyes, Sistemas de Información y Tutor de Proyecto

Hay muchos más profesores...
#GraciasProfesores

Lo que cada uno de nosotros es hoy y será mañana es el resultado de la sinergia entre nuestra individualidad y lo que compartimos y colaboramos con los demás. En ese proceso los profesores marcamos y nos marcan por siempre...
teach+learn

Fin del Hilo!

viernes, 27 de marzo de 2020

Meditación del Papa Francisco en bendición Urbi et Orbi por pandemia del coronavirus

La bendición Urbi et Orbi se hace solo en la Pascua de Resurreción y en la Navidad. A hoy 27 de marzo de 2020, debido a la Pandemia de Coronavirus que inició en China en diciembre del año pasado, el Papa Francisco realizó una celebración especial e impartió esta bendición. A continuación transcribo el texto completo de la medicación:



«Al atardecer» (Mc 4,35). Así comienza el Evangelio que hemos escuchado. Desde hace algunas semanas parece que todo se ha oscurecido. Densas tinieblas han cubierto nuestras plazas, calles y ciudades; se fueron adueñando de nuestras vidas llenando todo de un silencio que ensordece y un vacío desolador que paraliza todo a su paso: se palpita en el aire, se siente en los gestos, lo dicen las miradas.
Nos encontramos asustados y perdidos. Al igual que a los discípulos del Evangelio, nos sorprendió una tormenta inesperada y furiosa. Nos dimos cuenta de que estábamos en la misma barca, todos frágiles y desorientados; pero, al mismo tiempo, importantes y necesarios, todos llamados a remar juntos, todos necesitados de confortarnos mutuamente.
En esta barca, estamos todos. Como esos discípulos, que hablan con una única voz y con angustia dicen: “perecemos” (cf. v. 38), también nosotros descubrimos que no podemos seguir cada uno por nuestra cuenta, sino solo juntos. Es fácil identificarnos con esta historia, lo difícil es entender la actitud de Jesús.
Mientras los discípulos, lógicamente, estaban alarmados y desesperados, Él permanecía en popa, en la parte de la barca que primero se hunde. Y, ¿qué hace? A pesar del ajetreo y el bullicio, dormía tranquilo, confiado en el Padre —es la única vez en el Evangelio que Jesús aparece durmiendo—.
Después de que lo despertaran y que calmara el viento y las aguas, se dirigió a los discípulos con un tono de reproche: «¿Por qué tenéis miedo? ¿Aún no tenéis fe?» (v. 40). Tratemos de entenderlo. ¿En qué consiste la falta de fe de los discípulos que se contrapone a la confianza de Jesús? Ellos no habían dejado de creer en Él; de hecho, lo invocaron. Pero veamos cómo lo invocan: «Maestro, ¿no te importa que perezcamos?» (v. 38).
No te importa: pensaron que Jesús se desinteresaba de ellos, que no les prestaba atención. Entre nosotros, en nuestras familias, lo que más duele es cuando escuchamos decir: “¿Es que no te importo?”. Es una frase que lastima y desata tormentas en el corazón. También habrá sacudido a Jesús, porque a Él le importamos más que a nadie. De hecho, una vez invocado, salva a sus discípulos desconfiados.
La tempestad desenmascara nuestra vulnerabilidad y deja al descubierto esas falsas y superfluas seguridades con las que habíamos construido nuestras agendas, nuestros proyectos, rutinas y prioridades. Nos muestra cómo habíamos dejado dormido y abandonado lo que alimenta, sostiene y da fuerza a nuestra vida y a nuestra comunidad.
La tempestad pone al descubierto todos los intentos de encajonar y olvidar lo que nutrió el alma de nuestros pueblos; todas esas tentativas de anestesiar con aparentes rutinas “salvadoras”, incapaces de apelar a nuestras raíces y evocar la memoria de nuestros ancianos, privándonos así de la inmunidad necesaria para hacerle frente a la adversidad.
Con la tempestad, se cayó el maquillaje de esos estereotipos con los que disfrazábamos nuestros egos siempre pretenciosos de querer aparentar; y dejó al descubierto, una vez más, esa (bendita) pertenencia común de la que no podemos ni queremos evadirnos; esa pertenencia de hermanos.
«¿Por qué tenéis miedo? ¿Aún no tenéis fe?». Señor, esta tarde tu Palabra nos interpela y se dirige a todos. En nuestro mundo, que Tú amas más que nosotros, hemos avanzado rápidamente, sintiéndonos fuertes y capaces de todo. Codiciosos de ganancias, nos hemos dejado absorber por lo material y trastornar por la prisa.
No nos hemos detenido ante tus llamadas, no nos hemos despertado ante guerras e injusticias del mundo, no hemos escuchado el grito de los pobres y de nuestro planeta gravemente enfermo. Hemos continuado imperturbables, pensando en mantenernos siempre sanos en un mundo enfermo.
Ahora, mientras estamos en mares agitados, te suplicamos: “Despierta, Señor”. «¿Por qué tenéis miedo? ¿Aún no tenéis fe?». Señor, nos diriges una llamada, una llamada a la fe. Que no es tanto creer que Tú existes, sino ir hacia ti y confiar en ti. En esta Cuaresma resuena tu llamada urgente: “Convertíos”, «volved a mí de todo corazón» (Jl 2,12).
Nos llamas a tomar este tiempo de prueba como un momento de elección. No es el momento de tu juicio, sino de nuestro juicio: el tiempo para elegir entre lo que cuenta verdaderamente y lo que pasa, para separar lo que es necesario de lo que no lo es. Es el tiempo de restablecer el rumbo de la vida hacia ti, Señor, y hacia los demás.
Y podemos mirar a tantos compañeros de viaje que son ejemplares, pues, ante el miedo, han reaccionado dando la propia vida. Es la fuerza operante del Espíritu derramada y plasmada en valientes y generosas entregas. Es la vida del Espíritu capaz de rescatar, valorar y mostrar cómo nuestras vidas están tejidas y sostenidas por personas comunes —corrientemente olvidadas— que no aparecen en portadas de diarios y de revistas, ni en las grandes pasarelas del último show pero, sin lugar a dudas, están escribiendo hoy los acontecimientos decisivos de nuestra historia: médicos, enfermeros y enfermeras, encargados de reponer los productos en los supermercados, limpiadoras, cuidadoras, transportistas, fuerzas de seguridad, voluntarios, sacerdotes, religiosas y tantos pero tantos otros que comprendieron que nadie se salva solo.
Frente al sufrimiento, donde se mide el verdadero desarrollo de nuestros pueblos, descubrimos y experimentamos la oración sacerdotal de Jesús: «Que todos sean uno» (Jn 17,21). Cuánta gente cada día demuestra paciencia e infunde esperanza, cuidándose de no sembrar pánico sino corresponsabilidad. Cuántos padres, madres, abuelos y abuelas, docentes muestran a nuestros niños, con gestos pequeños y cotidianos, cómo enfrentar y transitar una crisis readaptando rutinas, levantando miradas e impulsando la oración. Cuántas personas rezan, ofrecen e interceden por el bien de todos. La oración y el servicio silencioso son nuestras armas vencedoras.
«¿Por qué tenéis miedo? ¿Aún no tenéis fe?». El comienzo de la fe es saber que necesitamos la salvación. No somos autosuficientes; solos nos hundimos. Necesitamos al Señor como los antiguos marineros las estrellas. Invitemos a Jesús a la barca de nuestra vida. Entreguémosle nuestros temores, para que los venza.
Al igual que los discípulos, experimentaremos que, con Él a bordo, no se naufraga. Porque esta es la fuerza de Dios: convertir en algo bueno todo lo que nos sucede, incluso lo malo. Él trae serenidad en nuestras tormentas, porque con Dios la vida nunca muere. El Señor nos interpela y, en medio de nuestra tormenta, nos invita a despertar y a activar esa solidaridad y esperanza capaz de dar solidez, contención y sentido a estas horas donde todo parece naufragar.
El Señor se despierta para despertar y avivar nuestra fe pascual. Tenemos un ancla: en su Cruz hemos sido salvados. Tenemos un timón: en su Cruz hemos sido rescatados. Tenemos una esperanza: en su Cruz hemos sido sanados y abrazados para que nadie ni nada nos separe de su amor redentor. En medio del aislamiento donde estamos sufriendo la falta de los afectos y de los encuentros, experimentando la carencia de tantas cosas, escuchemos una vez más el anuncio que nos salva: ha resucitado y vive a nuestro lado.
El Señor nos interpela desde su Cruz a reencontrar la vida que nos espera, a mirar a aquellos que nos reclaman, a potenciar, reconocer e incentivar la gracia que nos habita. No apaguemos la llama humeante (cf. Is 42,3), que nunca enferma, y dejemos que reavive la esperanza.
Abrazar su Cruz es animarse a abrazar todas las contrariedades del tiempo presente, abandonando por un instante nuestro afán de omnipotencia y posesión para darle espacio a la creatividad que sólo el Espíritu es capaz de suscitar. Es animarse a motivar espacios donde todos puedan sentirse convocados y permitir nuevas formas de hospitalidad, de fraternidad y de solidaridad.
En su Cruz hemos sido salvados para hospedar la esperanza y dejar que sea ella quien fortalezca y sostenga todas las medidas y caminos posibles que nos ayuden a cuidarnos y a cuidar. Abrazar al Señor para abrazar la esperanza. Esta es la fuerza de la fe, que libera del miedo y da esperanza.
«¿Por qué tenéis miedo? ¿Aún no tenéis fe?». Queridos hermanos y hermanas: Desde este lugar, que narra la fe pétrea de Pedro, esta tarde me gustaría confiarlos a todos al Señor, a través de la intercesión de la Virgen, salud de su pueblo, estrella del mar tempestuoso. Desde esta columnata que abraza a Roma y al mundo, descienda sobre vosotros, como un abrazo consolador, la bendición de Dios.
Señor, bendice al mundo, da salud a los cuerpos y consuela los corazones. Nos pides que no sintamos temor. Pero nuestra fe es débil Señor y tenemos miedo. Mas tú, Señor, no nos abandones a merced de la tormenta. Repites de nuevo: «No tengáis miedo» (Mt 28,5). Y nosotros, junto con Pedro, “descargamos en ti todo nuestro agobio, porque sabemos que Tú nos cuidas” (cf. 1 P 5,7).
Fuente: https://www.aciprensa.com/noticias/meditacion-de-papa-francisco-en-bendicion-al-mundo-e-indulgencia-plenaria-por-coronavirus-43852



jueves, 12 de marzo de 2020

Tiempos de Corona Virus o Covid19...

Ayer la Organización Mundial de la Salud (OMS) declaró la pandemia por el virus Covid19, popularmente conocido como CoronaVirus. Hace diez (10) años hubo un caso similar con el H1N1 o gripe porcina. La preocupación por el Covid19 empezó el 31 de diciembre del año pasado, aquí hay una línea del tiempo justo antes de la declaratoria oficial de pandemia y aquí una lista de varios sitios con información en tiempo real, como mapas e infografías, entre ellos este mapa de la Universidad Johns Hopkins.

El virus parece una gripa normal, pero ya hay 4.717 víctimas mortales y de 127.749 infectados solo hay 68.305 personas totalmente recuperadas, una tasa de 53.5%, casi un cara y sello...

Justo un día antes de la declaratoria de pandemia, un artículo en The Atlantic proponía cancelar todo, como única medida para frenar el virus. En Redes Sociales resumí el artículo en cuatro puntos y una cita:

  1. El virus ha mostrado una capacidad exponencial de contagio.
  2. La mortalidad del virus no es tan alta pero es peligroso y hay riesgo de muerte.
  3. Por ahora lo mejor es conservar la distancia para evitar la propagación del virus. ¡Cancelar todo!
  4. Que los poderoso no minimicen el tema.
  • "...This suggests that anyone in a position of power or authority, instead of downplaying the dangers of the coronavirus, should ask people to stay away from public places, cancel big gatherings, and restrict most forms of nonessential travel."

Para muchas personas era necesario un llamado a la calma y seguir considerando el virus como una simple gripa. Pero después de que la OMS declaró la pandemia, muchos países corrieron a tomar las medidas que venían aplazando desde hace un mes. Estados Unidos, por ejemplo, prohibió por un mes los vuelos desde Europa (excepto desde el Reino Unido). En Alemania, Angela Markel manifestó que se estimaba un contagio entre el 60% y el 70%. En Colombia no tenemos liderazgo ni presidente, pues está enfocado en desmentir las evidentes verdades sobre compra de votos y ñeñe política y un largo etcetera pues tiene una pésima imagen de 23%...

Mientras tanto, el precio del dolar sigue subiendo, el del petroleo bajando y las bolsas se caen. Además de la crisis de pánico e incertidumbre, se avecinan serios problemas económicos y en Colombia todo sigue igual, los gobernantes no sirven. En la frontera con Venezuela, aquí en Cúcuta, por ejemplo, cada día es peor y la falta de humanidad, la crueldad y la trata de personas son la base de la economía local.

Hay quienes han convertido el tema en un meme y quienes consideran exageradas las medidas de la OMS y los gobiernos.

...

Esta nota la dejé en borrador el 12 de marzo y la publico hoy 17 de marzo... En Colombia ya  hay 75 personas infectadas con el virus...

Ese 12 de marzo, mientras los estudiantes presentaban un quiz, me puse a escribirla porque tenía el presentimiento de que era tarde para reaccionar... Justo después del 12 de marzo todo cambió en Colombia...

Pienso en este momento, luego de haber escritro otra nota sobre el mismo tema: Si varios colombianos inquietos veíamos venir la situación ¿por qué Duque no obró con oportunidad? ¿Tan poca visión tienen él y sus asesores?

Justo hace unos minutos habló por televisión para anunciar la medida que debió tomar hace un mes. Y comenzó diciendo que estaban trabajando en el tema desde el año pasado... mentiroso...